Que para el amor no hay edad, que mi pareja es mucho mayor y con más experiencia, que mis amigas tienen novios muy mayores y le dan gusto en todo, que estoy aburrida de mi casa y le voy a hacer caso al vecino de irme a vivir con él… ¿has escuchado frases como esta?, estás ante discursos que normalizan las uniones tempranas.
Si bien es cierto que el amor llega cuando menos no lo esperamos, puede que te enamores de una persona y que probablemente esta sea mayor, sin embargo, recuerda que construir una relación afectiva debe pasar no solo por el amor, el gusto, el placer, sino por la confianza y contar con condiciones similares que no coloque en desventaja a alguno de los dos.
Los matrimonios infantiles o Uniones Tempranas, siguen siendo una realidad y una constante en nuestra sociedad, no es claro los motivos por los cuales se originan, pero si es evidente que tiene relación directa con la creciente hipersexualización de la figura femenina sobre todo a edades tempranas, tomándose como un objeto de deseo por parte de figuras masculinas y como algo normal o deseable.
Sin embargo, tenemos que estar alertas, ser conscientes que este tipo de relaciones colocarán en desventaja a la niña o adolescente, dado que aun su cuerpo, su personalidad e identidad y su sexualidad están en proceso de construcción y maduración, por lo cual en ocasiones podemos no darnos cuenta de ciertas manifestaciones, actitudes y prácticas pueden ser señales de violencias y de inequidades en la pareja. Por ello es importante que sepas identificarlas y diferenciarlas para que no caigas en una relación tóxica o violenta, que pueda desencadenar un embarazo no deseado o violencias de género.